S01xEp. 01 - Hate Trial

Julio Esteban Richter || Rictor
Mutante|Patrulla X
Con: Boom Boom
En: Nueva York.

Gracias al “explosivo” don de Boom Boom pudimos salir de carro antes de que aquel monstruo lo redujera a una especie de acordeón mecánico, con nosotros descuartizados en su interior.
¿De donde salió esa cosa? Me pregunté mientras me escabullía entre los pies del coloso mecánico en busca de un lugar seguro. Mientras tanto Tabitha detenerlo, sin embargo sus detonaciones resultaron inútiles para atravesar las gruesas placas metálicas que protegían todos sus mecanismos internos.
¡Eso es! Pensé entusiasmado. Si bien, nuestros poderes eran incapaces de destruir esa infernal mole, no significaba que no fuéramos capaces de contener su furia.
La rubia me miro esperando que tuviera un plan, sin embargo su descuido casi le cuesta la vida. Por suerte pudo el enorme brazo mecánico que intentó aplastarla. El suelo quedó agrietado por el golpe de aquel destructor. Eso facilitaba mucho mi trabajo.
-¡apártate!- le urgí a la chica al tiempo que ponía mis palmas sobre el pavimento. El asfalto ya estaba dañado a causa de los golpes y las pisadas del robot y; si mi percepción sísmico-vibratoria estaba en lo correcto, el alcantarillado de la ciudad pasaba algunos metros por debajo de los pies de aquel gigante. Solo era cuestión desestabilizar el piso y el caería por su propio peso, o al menos eso creí.
Conforme a mi plan hice vibrar el piso con tal fuerza que incluso los cristales de las ventanas en los edificios contiguos comenzaron a quebrarse mientras en engendro mecánico se acercaba a mi repitiendo una y otra vez su trillado dialogo: destruir… destruir… - solo quiero ver que lo intentes…- gruñí con la mandíbula tensa a causa del esfuerzo sobrehumano que estaba realizando en ese momento. Pude sentir enormes gotas de sudor escurriendo por mi frente y los tendones de mis brazos a punto de reventar. Solo un poco más… solo un poco más…
Cuando el robot estuvo lo suficientemente cerca, el suelo bajo sus pies se rompió provocando que este quedara atrapado de la cintura para abajo. Genial, pensé con una sonrisa de satisfacción dibujada en mi rostro. De verdad creí que todo había acabado, que el robot se quedaría quieto y que podríamos salir de allí sin más problemas. Estaba muy equivocado.
En lugar de asumir su inminente derrota, el golem mecanizado intentando escapar. Sus ojos se encendieron con un intenso fulgor carmesí y comenzó a disparar unos extraños rayos – ¿que carajos está pasando?- cuestioné mientras me intentaba poner de pie y trataba de esquivar los manotazos y los disparos del robot. Entonces lo vi. Un segundo robot apareció un par de calles más adelante. Voltee hacia Boom Boom esperando que ella no estuviera viendo lo mismo que yo. De verdad preferiría estar alucinando. Pero al ver su cara supe era real, que había sido un terrible error venir a la ciudad, que había sido estupido regresar al instituto esperando que las cosas comenzaran a salir bien para variar y que había sido terriblemente descuidado al darle la espalda al robot que tenía tras de mi; pues este alcanzó a golpearme si que fuera capaz de hacer algo para evitarlo.
Sentí el impacto de su enorme mano contra mi cuerpo y pude escuchar un crac en mi interior antes de salir volando varios metros, caer sobre un automovil y perder por completo el conocimiento.

Al final Scott regresó del transe del cual era victima a causa del estres y accedió a incluirme en la siguiente misión como un elemento más de la patrulla X. desde luego eso era solo teoría, pues me habían hecho participe de dicha misión con el único objetivo de mantenerme vigilada ¡como sino lo supiera! aun así, el hombre de las lentillas carmesí trato de disimularlo aceptando la utilidad que una telépata desinhibida como yo representaría en el campo de batalla.

-les puedo asegurar, chicos…- comente refiriéndome a Bobby y Remy – que mantenerme vigilada no será una tarea tan desagradable-